Historias de un futuro hipotético

La poesía es una forma muy personal de ver, comprender y vivir en el mundo. Cada poeta aporta ese granito de arena, esa pincelada de su color favorito, y Luis Aguilar lo hace desde un color verde esmeralda y un optimismo inusitado.

Como decía Antonio Marín Albalate en su prólogo a Leopoldo María Panero:

«No hay otra vida que la página, otro lirismo que el verso y que, al fin, la belleza es un absurdo y no responde a ninguna lógica».

Luis Aguilar intenta abrazar la belleza con sus versos, la belleza y todo lo que se deje abrazar; y lo consigue con su último libro, que aun perteneciendo a sus primeros poemas, alcanza una libertad expresiva y temática sublime, favorecida por su verso libre y agilidad vanguardista.