La heredad del señor

A principios del siglo XX era muy difícil llegar a La Heredad, pueblo de Extremadura a orillas del Guadiana y a los pies de los Montes de Toledo. Salir de La Heredad era casi imposible.

La Heredad del Señor narra, en la voz de los forasteros que fueron llegando a ese lugar imaginario, las convulsiones reales del siglo XX que salpicaron todos los rincones de España. Ningún forastero en La Heredad podía permanecer como mero observador imparcial y acababa hundiéndose en las miserias humanas, en las ambiciones, en los sueños, en los rencores y en los amores que los personajes que pueblan este paisaje heredaban generación tras generación.

En La Heredad del Señor cabe la tragedia de la guerra civil y de la posguerra, cabe la comedia de los niños que miran al hombre llegar a la luna una noche de verano en una pantalla de televisión en blanco y negro con muchas interferencias, cabe el espanto de los acontecimientos históricos de Castilblanco y de Mesas de Ibor y cabe la sonrisa de los primeros amores de la adolescencia. Por sus páginas desfilan cientos de personajes reales o inventados. Como lector, serás un forastero más que, como los que narran las historias de esta obra, no podrás permanecer ajeno a las razones íntimas que durante casi un siglo impidieron que prevaleciera la Razón. Cuando termines de leer el libro, quizá te cueste dejar La Heredad. Es muy posible que, al menos, una parte de ti se quede allí para siempre.