Cuando se levanta la niebla

Asturias, octubre 1934. Miles de mineros salen de los pozos y se lanzan a la Conquista del Cielo. Tras hacerse dueños de las Cuencas mineras, toman Oviedo con la ayuda de los obreros de la capital. Así comienza la Revolución de Ochobre.

Nicanor trabaja de picador en el Pozo Fondón (Sama de Langreo) y Nolín es un joven universitario, hijo de campesinos y recién llegado a la capital asturiana. Mientras el primero participa en las principales batallas que tienen lugar en Sama y en Oviedo, el segundo trabaja para Avance, el periódico socialista de Asturias. Así, cada uno a su manera, ambos serán iniciados a la política y descubrirán un mundo que les era hasta entonces totalmente desconocido : el del compromiso social y la lucha obrera.

Los dos jóvenes se conocerán en el Oviedo revolucionario pero nunca llegarán a ser amigos. Un trágico suceso los unirá para siempre en un odio profundo y duradero.

Bruselas, julio 2014. Pablo, nieto de Nolín, vive en Bruselas, ciudad en la que nació. Sus padres emigraron a Bélgica en los años sesenta y él trabaja ahora de profesor en un Instituto de la capital belga. En la casa de sus padres, acaba de encontrar unas cartas que pertenecieron a su abuelo. En ellas habla de un tal Nicanor, un personaje misterioso que parece haber desempeñado un papel trascendental en la vida de Nolín. Pablo decide emprender un viaje hacia Asturias, un viaje iniciático hacia sus orígenes. Pasará unas semanas en la villa de Infiesto (Piloña) donde descubrirá quién era Nicanor y qué extraña relación lo unía a su abuelo.