Amor y Virtud, es la primera novela de una apasionante y dramática trilogía ambientada a finales del S.XX en Utah, Estados Unidos. Y narra las vidas y amores de unos jóvenes con vidas particulares. La autora ha creado una trama donde la personalidad de cada personaje está muy definida. En cada uno de ellos predomina una virtud que se va desarrollando a lo largo de la narración, facilitando la fluidez de la historia, y haciendo que el lector se sienta fácilmente identificado con cada uno de ellos. Así pues, esta novela consigue que te sumerjas en ella mediante la experimentación de los triunfos y fracasos que les acontece a los personajes con sus propias vivencias.

Aunque el género que trata es el romántico-dramático, los hechos se desarrollan de forma tal que el lector no puede fácilmente presuponer ninguno de los acontecimientos, creando así una necesidad acuciante de seguir leyendo. Éstos y otros rasgos hacen de esta novela una lectura adictiva, amena y fresca, que no dejará indiferente a nadie.

Como una de las primeras lectoras de Amor y Virtud, debo admitir que fue una novela que me atrapó desde el primer instante. Su narración, en un estilo sencillo, la hace especialmente fácil de leer, pero la autora ha conseguido, con su estilo fluido y poco recargado, no perder ni el más mínimo detalle de sus descripciones. Es esto último uno de los puntos que yo considero más positivos de la novela; conseguirás imaginar completamente cada una de las escenas que la autora describe. La minuciosa creación de los personajes es otra de las características más valorables en la historia. Encariñarse con ellos es inevitable; sufrir con sus problemas y vivir sus vivencias a medida que vas leyendo. Sus personalidades están definidas desde el principio sin error, si bien es más adelante donde se descubre cómo esto fundamenta la historia.

En definitiva, Amor y Virtud es una novela altamente recomendable no solamente para jóvenes adolescentes, sino también para aquellos dispuestos a leerla con total profundidad.

Lo primero es felicitar a la autora por conseguir que Amor y Virtud enganche desde la primera a la última página. En pocas palabras : es una historia que deja ganas de más y con la que muchos de nosotros nos identificamos! Muchísimas ganas del segundo y recomiendo a todo el mundo que lo lea sin falta